Por: Dr. Carlos A. Dávila Rojas*
Antes del 17 de noviembre del presente año, la Asamblea Universitaria de la Unsaac, debe elegir a sus nuevas autoridades: Rector y 02 Vice Rectores, para un periodo de 05 años (nov.2011 – nov.2016). De lo que se haga, en la nueva gestión, dependerá el estancamiento o despegue de la Casa Antoniana; pero, ¿La gestión que termina -liderada por el actual Rector Dr. Víctor Raúl Aguilar Callo- hizo progresar a la Unsaac? Creemos que si; por las siguientes consideraciones:
Gracias a los recursos del canon (especialmente, gasífero) se han ejecutado importantes obras en nueva infraestructura, ampliaciones y equipamientos, de muchas Facultades; tanto en Cusco, como en las sedes y filiales de provincias. El nuevo Pabellón de la Carrera profesional de Turismo y la Casa Concha, son dos últimas grandes inversiones. Se han creado nuevas carreras profesionales ampliando las filiales y sedes en provincias (Vilcabamba, Puerto Maldonado, Canas, etc.). La firma de convenios con diversas universidades del país y el mundo constituyen, también, un logro importante de la gestión (2007-2011). Hay un proceso de acreditación de las Facultades de Educación y Ciencias de la Salud; y, un trabajo inicial de la Oficina de acreditación, con el resto de carreras profesionales. Finalmente, esta prevista la creación del Vice rectorado de Investigación, en los próximos días.
Los logros mencionados, junto a otras acciones y condiciones de viabilidad institucional deben permitir el despegue de nuestra Unsaac. El horizonte, de largo plazo, de las transferencias del canon garantiza la continuidad de inversiones en infraestructura y equipamiento; que debe enmarcarse dentro de un nuevo plan estratégico de desarrollo y expansión macro regional de la Unsaac.
La creación del Vice rectorado de Investigación, debe garantizar el desarrollo de la función de investigación científica-tecnológica y humanística, para mejorar nuestra función principal de formación profesional; comprobando y optimizando los conocimientos vigentes; buscando soluciones a las diversas problemáticas que aquejan a nuestra sociedad; e, ingresando al proceso global de generación de conocimientos de la actual revolución científico-tecnología y humanística, liderándola en la región.
En las sedes y filiales, que ha acercado a nuestra universidad a las provincias y ampliado su presencia en la macro región sur del país, hay que garantizar su sostenibilidad y progreso.
Debemos poner en valor los convenios con diversas Universidades del mundo, para internacionalizar a la Unsaac; a través de una política que amplié los convenios y masifique sus beneficios; especialmente, la doble titulación de docentes y egresados que se benefician de las mismas.
Necesitamos acreditar a nuestra universidad (carreras profesionales y componentes académicos) para consolidar su prestigio y vigencia; respaldar el desempeño profesional de nuestros egresados; garantizar la actualización y progreso de los mismos, a través de la Escuela de Post Grado y las actividades de extensión académica. Las Carreras Profesionales, deben atender las demandas de los mercados laborales y las necesidades de la sociedad; para ello, se deben actualizar los planes curriculares; elevar la calidad docente, con innovaciones pedagógicas en los procesos de enseñanza-aprendizaje; y, mejorando los hábitos de estudio del estudiantado.
Se necesita ordenar y coordinar, coherentemente, las funciones universitarias. Hay que reconocer que la actividad principal es la formación profesional; y, el resto de funciones (investigación, proyección social y producción de bienes) se relacionan a la principal, que cumple el rol de líder en el sistema que componen. Los frutos de la investigación científica-tecnológica y humanística deben actualizar, mejorar y modernizar –sostenidamente- los conocimientos impartidos en la formación profesional; la producción de bienes y servicios son el resultado de la aplicación y extensión de nuestros conocimientos científicos, tecnológicos y humanísticos; permitiendo diversificar nuestras fuentes de financiamiento; la proyección social debe vincularnos académica, técnica y culturalmente con las redes sociales, productivas e institucionales.
Igualmente, necesitamos mejorar el sistema administrativo haciéndolo transparente, ágil, flexible, con criterios de gestión eficaz, visión cliente y desconcentrado.
Es urgente que la Unsacc desarrolle aptitudes e iniciativas programáticas para apoyar y respaldar las luchas y exigencias populares por equidad social, descentralización, competitividad y uso sostenible de nuestros recursos naturales y medioambientales.
Finalmente, en tanto la universidad y su sistema de gobierno están organizados en base a autonomías de gobierno, académicas, económicas y administrativas dentro de la ley; es crucial reconocer que debemos construir un espacio de consenso y legitimidad que le de gobernabilidad y sostenibilidad al nuevo gobierno universitario. Un aspecto que impidió mayores logros y progresos a la gestión del gobierno que termina, fue la crisis política y de gobernabilidad que, aún, no está superada. Se hace necesario resolverla, en base a un programa de gestión universitaria y equipo de gobierno (Rector y Vice rectores) que respondan –eficazmente- a los retos y exigencias de progreso, renovación, democracia, gobernabilidad y bienestar de nuestra Comunidad Antoniana. 
(*) Decano de la Facultad de Economía-UNSAAC.
http://davilarojas.blogspot.com