domingo, 5 de julio de 2015

¿QUO VADIS UNSAAC? (II)

¿QUO VADIS UNSAAC? (II)

Aprobación de nuevo Estatuto: ¿Crisis o fortalecimiento de la institucionalidad?

Por: Dr. Carlos A. Dávila Rojas*.

Estamos ad portas, al fin, de la aprobación del nuevo Estatuto de la Unsaac; elaborada por la Asamblea Estatutaria en condiciones de confrontación contra las actuales autoridades centrales; quienes, a su vez, fueron mezquinos en recursos. Luego de su aprobación, se espera un proceso electoral legal y ordenado que renueve a las actuales autoridades vía elecciones universales, tal como establece la Ley 30220. Hay consenso en el Consejo Universitario de la Unsaac, a este respecto.
Sin embargo; podría ocurrir que el nuevo Estatuto establezca normas que generen crisis e ingobernabilidad en la Unsaac; con sus consiguientes procesos legales, conflictos, etc.; que podría postergar el proceso electoral que debería ser muy pronto. Esta amenaza, solo podría ser explicada por la falta de visión y proyección de los integrantes de la Asamblea Estatutaria en su confrontación con la autoridad central.
Recordemos que la Unsaac, respecto a los plazos de adecuación a la nueva Ley 30220, ya ha sido observada por la Superintendencia Nacional de la Educación Universitaria (SUNEDU) que ha establecido, el 31 de diciembre del presente año, como plazo máximo para proceder a elegir a las nuevas autoridades. Una innecesaria crisis de gobernabilidad, podría superar ese plazo.
En cuanto se apruebe el nuevo Estatuto se iniciará un debate sobre sus características: ¿constituye una norma útil para el progreso institucional; o, sólo reproduce los actuales marcos académicos, administrativos y de gobierno en que se profundiza la crisis de nuestra Unsaac, desde hace varios años?

¿CONTINUISMO O REGRESISMO?
Preocupa que, en perspectiva de las elecciones universales, la confrontación básica sea entre grupos de docentes que desean la continuidad del actual grupo que, hace 9 años, gobierna la Unsaac (Mi Unsaac); y, quienes desean que regrese, el grupo de docentes que ya gobernó nuestra Universidad. Es visible, en ambos grupos; el desgaste, la falta de propuestas y de liderazgos renovados que demanda el progreso de nuestra Universidad. Mi Unsaac, ya es inviable como opción de gobierno; y la oposición (Dignidad Antoniana) solo lidera el descontento, no logra cohesión programática y tiene crisis de liderazgo con fuerte presencia de ex autoridades.

RECURSOS CANON: ¿BOTÍN EN DISPUTA?
La disputa electoral para elegir, a través del voto universal, a las nuevas autoridades (Rector, Vicerrectores y Decanos) amenaza ser muy sucio y violento; cuya causa principal pareciera ser la gran ansiedad por manejar (o seguir manejando) los abundantes recursos del canon gasífero, que tiene la Unsaac. Hay que impedir y derrotar estas pretensiones. La Unsaac necesita una nueva alternativa que exprese las demandas de progreso institucional con gestión eficaz y transparencia. La mayoría de docentes y estudiantes están listos a apoyar procesos de renovación, democratización y recuperación de la presencia antoniana en nuestra región y país.

PROGRAMAS RENOVADOS Y NUEVOS LIDERAZGOS.
Hay que reconocer que la crisis de la Unsaac es la falta de calidad en la enseñanza; expresada en el fenómeno del credencialismo. Los procesos de acreditación de sus carreras profesionales, la Escuela de Post Grado, sus servicios y sistema administrativo; son la alternativa de solución. Pero, también, se hace necesario financiar con recursos canon un plan de inversiones para mejorar la infraestructura y liderar la investigación científica regional con un gobierno universitario
democrático, moderno, transparente y de gestión eficaz al servicio del desarrollo institucional y del bienestar de sus estamentos.
Finalmente, reconociendo que los liderazgos son componentes fundamentales de los movimientos políticos; en nuestra Unsaac, es visible la demanda de liderazgos renovados. No se trata de individualidades; sino de personalidades con programas renovados y viables; que representen amplios consensos institucionales y a las nuevas generaciones; además, de tener reconocidas y comprobadas virtudes de gestión y transparencia.


(*) Docente Unsaac.