sábado, 26 de diciembre de 2015

FUERZA POPULAR. SOBRE EXORCISMOS, SÍNDROMES Y VIEJA GUARDIA

FUERZA POPULAR.

SOBRE EXORCISMOS, SÍNDROMES Y VIEJA GUARDIA.

Bastó que Keyko Fujimori, en su exposición del 01.10.2015 en la Universidad de Harvard, se mostrara tolerante con la “unión civil” y señale que fue “positivo para el país” el trabajo de la Comisión de la Verdad y Reconciliación; para que el diverso espacio caviar estalle en mil pedazos y huya en diversas direcciones; cual exorcizados. Seguidamente, Keyko, ha abierto un espacio de simpatía, cual síndrome, entre determinados sectores caviares; consolidado con la incorporación de Vladimiro Huaroc a su plancha presidencial. La crisis caviar es de tal magnitud; que, ética y programáticamente,  ya nadie sabe dónde están ni dónde terminarán.  Si a ello sumamos la descomposición y desolación del Toledismo, se observa que prácticamente está desapareciendo  el  feroz espacio anti fujimorista; que les significó poder y recursos durante 15 años; tiempo en el que fueron enfrentados por la vieja guardia, la joven Keyko y Kenyi, aun niño.  

No veo que exista, en el fujimorismo, una contradicción entre “líderes históricos” y “cuadros nuevos”. Aunque el fujimorismo tiene una presencia de 25 años en nuestra historia política; Fuerza Popular es la expresión de la, reciente, integración de los diversos ex grupos fujimoristas; liderados por Keyko; y, en la que, aun, no es visible una vida partidaria ni formación de cuadros nuevos. Lo que si hay, es un proceso de organización partidaria con mucha expectativa electoral; siendo visible el afán de entrismo de tránsfugas, topos, etc., en sus listas congresales. Fenómeno similar, que en el resto de listas electorales. Igualmente, la incorporación de José Chlimper Ackerman, en la Plancha presidencial de Fuerza popular, es una muestra  categórica de que Keyko valora a viejos cuadros fujimoristas que colaboraron con su padre y estuvieron cercanos a ella. Chlimper, fue Ministro de Agricultura del Presidente Fujimori  entre agosto y octubre del 2000 y Director del BCR elegido por el Congreso de la Republica con votos de la bancada fujimorista, liderada por Keyko, para el periodo 2006 – 2011.

La comentada evaluación de los actuales miembros de la bancada congresal, que mostró cierta disciplina, pero poco brillo; parece que responde a una política de mejora de las postulaciones que alista Fuerza Popular. La condición de “lideres” o “figuras” históricas no puede ser separada de la necesaria vigencia y aporte, que los mismos, deben tener en la presente batalla programática y electoral. Parece que algunos(as), se han estado durmiendo en sus laureles. Es muy extraño  observar que, sean, ciertos enemigos banales del fujimorismo quienes estén presionando para sacar a la vieja guardia de las postulaciones; no pueden ser, ellos,  los más indicados para decirle, a Keyko, como debe ser la “renovación” del fujimorismo. En varios partidos históricos como el APRA, PPC, Izquierdas; los componentes fundamentales son sus viejos líderes fundadores y  dirigenciales. Nunca se plantearon apartarlos; sino procesar una renovación ordenada. En el fujimorismo, cuyo perfil ideo-político-doctrinario está en construcción;  no se puede decir, aun, que hay renovación; por lo que, deben controlar el entrismo y transfuguismo. En escenario gobierno u oposición, necesitará de la mayor coherencia, disciplina y lealtad para tomar grandes decisiones; evitando descomposiciones y abandonos, congresales y/o partidarios; como los ocurridos en el Toledismo y Humalismo.

Finalmente, es cierto que el Fujimorismo necesita seguir resolviendo sus déficits democráticos y de transparencia. La construcción de un solo partido; con nítida práctica democrática en el Congreso de la Republica de todos los gobiernos, desde 2001 a la fecha, va mostrando al fujimorismo como uno de los partidos democráticos más grandes y organizados del país; que, casi ganó las elecciones del 2011.  En transparencia, lo que debe hacer el   fujimorismo es un buen deslinde con Vladimiro Montesinos. “El Peso de la Verdad”, publicado por el ex Presidente Alberto Fujimori, es un buen punto de partida. No son escritos de acomodo a la situación actual; sino,  recopilación de respuestas inmediatas al proceso de persecución y demolición al que fue sometido, desde fines del año 2000, judicializándole sus responsabilidades políticas.

Carlos Arturo Dávila Rojas.

26.12.2015.